Asertividad es
aquella habilidad personal que nos permite expresar sentimientos,
opiniones y pensamientos, en el momento oportuno, de la forma
adecuada y sin negar ni desconsiderar los derechos de los otros.
Para
manejar un conflicto o defender los propios intereses en cualquier
situación, existen varias formas de hacerlo: pasivo (no defiende sus
intereses), agresivo (defiende sus intereses sin respetar el de los
otros) y existe otra forma de hacerlo que sería el punto intermedio
entre estos dos: asertivo
Errores
que hay que tratar de evitar:
Conducta
agresiva:
enfadarse y no buscar solución al problema.
Conducta
pasiva o sumisa:
quedarse callado delante de una objeción, porque el otro se impone.
Las conductas
pasivas son
aquellas que cuando se han de tomar decisiones las dejas para los
demás o no las tomas para evitar el conflicto. Estas conductas no
hacen que se expresen tus propias necesidades, tus pensamientos ni
tus sentimientos.
Las conductas
agresivas son
aquellas que cuando tomas decisiones, están basadas en tu potencial
para influir sobre los otros o sin tener en cuenta el posible impacto
sobre éstos. Estas conductas humillan o dominan a la otra persona,
física o emocionalmente.
La conducta
asertiva es
la habilidad de expresar tus pensamientos, sentimientos y
percepciones, de escoger cómo reaccionar, y de hablar de tus
derechos cuando es apropiado, con la finalidad de elevar tu
autoestima y ayudarte a desarrollar tu autoconfianza para expresar tu
acuerdo o desacuerdo cuando crees que es importante e incluso pedir a
los otros un cambio en su comportamiento ofensivo.
¿Cómo
podemos ser asertivos?
Una
de las técnicas que se utiliza es la siguiente:
Describir
los comportamientos que te desagradan: “Cuando tu…”
Expresar
tus sentimientos: “Yo me siento…”
Expresar
los motivos y consecuencias: “Porque…”
Explicar
petición: “Te pido por favor que…”
Un
ejemplo de esta técnica ante una situación de una persona que llega
reiteradamente tarde a las reuniones sería el decirle “cuando
tu llegas
tarde a la reunión yo
me siento frustrado porque pierdo
el tiempo esperándote y
esto me hace pensar que no respetas mi tiempo, por
lo que te pido por favor que
llegues puntual a nuestras reuniones”.
“Todos podemos enfadarnos, pero muy pocos son capaces de enfadarse en el momento oportuno, con la persona adecuada, por el motivo adecuado y de la manera adecuada”. Aristóteles.
Información
extraída de la
web: http://desarrollodepersonasyorganizaciones.com/2011/11/27/la-asertividad-para-dummies/
Gracias